El Caminante
Ponent Mon nos deleita con una nueva obra de Jiro Taniguchi.
La soledad es como todo, te pasas media vida deseándola y la otra media temiéndola. Y reconozco que soy el primero al que le da pereza ir a cualquier lado si no me acompañan, pero, ¿a que yendo solos descubrimos y nos pasan mil cosas?. Estás todo el trayecto pensando “¡qué lástima que no esté alguien conmigo para ver esto!”, pero de haber estado, ¿te habrías dado cuenta?. Pues básicamente de eso trata “El Caminante”, título que incita a la exploración de nuestro entorno (ya sea rural o urbano), al asombro casi infantil por las pequeñas cosas y a la curiosidad bien entendida. Y por supuesto, a la más selecta de las lecturas.
El Autor
Según la información ofrecida en el propio manga, Jiro Taniguchi nació el 12 de Agosto de 1947 en Tottori (Japón). Debutó como dibujante de manga en 1970 con “Un verano seco”. Desde 1976 hasta 1979 publicó con el guionista Natsuo Sekigawa “Ciudad sin defensas”, “El viento de oeste”, “Blanca” y “Lindo 3”. En los años ochenta volvieron a trabajar juntos en “La época de Bocchan”, obra larga sobre la vida en Japón durante la era Meiji (finales del siglo XIX). En los años noventa vieron publicados muchos trabajos en solitario, incluyendo este volumen y “Barrio Lejano” (obra publicada en España, al igual que “El Almanaque de mi Padre”), ganadora del premio L’Alph Art al mejor quión en el Salón de Angulema (Francia). Taniguchi ha ganado numerosos premios en su Japón natal y verdaderamente es un creador versátil y lleno de talento. Y tan lleno. Taniguchi, prolífico como pocos, se desmarca por un estilo gráfico limpio y una sensibilidad desbordante, que le han valido trabajar nada más y nada menos que con Moebius, una leyenda viva de la ilustración.
El Manga
Poco hay que comentar con respecto al argumento que no describa ya el título: Un hombre como personaje principal, y sus paseos como protagonistas de los 18 capítulos. Mis favoritos: “El camino más largo” y “Paisaje borroso”. Títulos evocadores, ¿verdad? De hecho, las cuatro últimas frases del manga me acabaron de descubrir a qué me estaba recordando la obra. ¡Es un haiku de 150 páginas!. Y por si no lo creéis, la filosofía de este estilo de poesía japonesa es “en este lugar, en este momento”, lema que comparten otras disciplinas (como el ikebana), y resumen perfecto de la actitud de… el hombre de la portada. Para que os hagáis una idea del protagonismo que adquieren las pequeñas cosas que van sucediendo en detrimento de a quién, durante el tomo entero ni siquiera conoceremos los nombres de los personajes o su relación. Para el dibujo J. Taniguchi se ha servido de líneas finas, de trazo pulcro (casi no hay tramas) y estilo realista. Especialmente en los fondos, tremendamente trabajados y llenos de detalles tanto en la ciudad como en la naturaleza. Hay que decir que el autor sabe manejarnos como quiere, pues gracias a su control del tiempo y el espacio narrativo es consciente en todo momento de dónde está, y lo más importante, sabe a dónde llevarnos. Porque si hay algo que caracteriza a este manga es como fluye, haciéndolo tan “cómodo” que lo devoraremos sin remedio en minutos. Claro que parte de la culpa recae en el uso minimalista de los diálogos, lo cual añade mérito al Taniguchi dibujante, ya que debe hacer más hincapié si cabe en la expresividad de sus personajes.
Para más información os recomiendo encarecidamente el comentario sobre este manga que encontraréis en la web de la editorial Ponent Mon, sección “Entrevistas y textos”.
La Edición
Esto es lo que nos han contado desde Ponent Mon: “Kodansha, la editorial que tiene los derechos de la obra, pidió que la edición española se realizase a través de la inversión de páginas que hizo Casterman para Francia. El mismo Taniguchi pidió que no se usase la portada de Casterman (no le gustaba), y en su lugar se utilizó la que aparecía en la edición italiana, hecha por Taniguchi. […], el último capítulo, tal y como indica su título, está realizado diez años después de acabar la obra, a modo de epílogo.
Tan sólo añadir que la editorial alicantina se supera si cabe, añadiendo a su cuidado formato Nouvelle Manga (lomo, tapa blanda con solapas… , lo habitual) unas páginas de especial blancura y satinado. Esto, añadido al estilo del autor, facilita enormemente la lectura. Y sí, vale 12 euros y medio, pero no deja de ser un número único.
Conclusión
Este es uno de los lanzamientos más arriesgados y adultos que he visto. Y por paradójico que resulte, no es por su contenido sexual o violento, sino todo lo contrario. Sus reflexiones, tanto por exceso como por defecto, podrán no ser atractivas para el gran público, pero si te gusta Jiro T. esta es una cita ineludible. Al menos hasta que se publique su obra “Crónicas del Viento” (junto a Kan Furuyama) a finales de julio. Mientras seguiremos disfrutando con las refrescantes propuestas de Ponent Mon, una editorial novel, pero que parece haberse afianzado gracias, sencillamente, a ser diferentes. Y atentos a este gran bombazo: según parece van a contar con obras realizadas específicamente y en exclusiva para ellos de autores de la talla de Kan Takahama y el propio Jiro Taniguchi.